Llevar una dieta más saludable y preocuparnos por nuestra salud es una acción increíble, pero ¿qué percepción tenemos de una dieta saludable?
Para mucha gente esto significa consumir de manera indiscriminada productos etiquetados como light, libre de azúcar, reducido en azúcar, reducido en grasa y más… pero, ¿qué significan en realidad estas etiquetas y por qué deberíamos tomar esta información en cuenta?
El que un producto sea etiquetado como “bajo en, reducido en, muy bajo en, etc.” no significa que sea libre de calorías, y en realidad, esto es lo que estas etiquetas significan:
Declaraciones de calorías
- Sin calorías: menos de 5 calorías por porción
- Bajo en calorías: 40 calorías o menos por porción
- Light: disminución de calorías un 30%, como mínimo, teniendo como referencia al alimento original
Declaraciones de grasa total, saturada, y trans
- Sin grasa: menos de 0.5 g de grasa
- Sin grasa saturada: menos de 0.5 g sin grasa saturada
- Sin grasa trans: menos de 0.5 gramos de grasa trans
- Bajo en grasa: 3 gramos o menos de la grasa total
- Bajo en grasas saturadas: 1 gramo o menos de grasa saturada
- Grasa reducida o menos grasa: por lo menos 25% menos grasa de la versión regular
Declaraciones de sodio
- Sin sodio o sin sal: menos de 5mg de sodio por porción
- Muy bajo en sodio: 35 mg de sodio o menos
- Bajo en sodio: 140 mg de sodio o menos
- Sodio reducido o menos sodio: por lo menos 25% menos sodio de la versión regular
Declaraciones de colesterol
- Sin colesterol: menos de 2 mg por porción
- Bajo en colesterol: 20 mg o menos
- Colesterol reducido o menos colesterol: por lo menos 25% menos colesterol de la versión regular
Declaraciones del azúcar
- Sin azúcar: menos de 0.5 gramos de azúcar por porción
- Azúcar reducido: por lo menos 25% menos azúcar por porción de la versión regular
- Sin azúcar o sin azúcar adicional: Sin azúcar o ingredientes que contengan azúcar son agregados en el proceso
Declaraciones de fibra
- Alto en fibra: 5 g o más de fibra por porción
- Buena fuente de fibra: 2.5 g hasta 4.9 g de fibra por porción
Como puedes ver, estos productos pueden seguir conteniendo grasas, azúcares o calorías. Lo peor es que, muchas veces, este etiquetado puede ser engañoso… pues en muchas ocasiones los productos etiquetados como “bajos en grasa” tienen un mayor contenido de azúcar, y viceversa, que el producto original para lograr el mismo sabor y, claramente, esto no lo hace más saludable. Pueden añadirse, asimismo, otros aditivos y sustancias o puede cambiarse el nombre de “azúcar” por otros nombres como “jarabe, fructosa…” y más, haciendo así “legal” el etiquetado de reducido en azúcar sin importar que contenga el mismo contenido… Es por ello que este tipo de etiquetas no deberían mirarse como una alternativa más saludable, al menos no siempre.
Este tipo de productos, al crear una percepción distorsionada y hacernos creer que son más saludables, suelen desencadenar el efecto halo, un efecto en el que, al dar una ilusión de ser más saludable, incita a un mayor consumo del mismo… lo que puede provocar incluso una mayor ingesta calórica que la que se daría con el producto original.
La realidad es que inclusive factores que no pensaríamos que alteran la percepción de lo que hace a un alimento “saludable” pueden provocar algún efecto psicológico. En una revisión del 2020, se analizaron distintos artículos que observaban la percepción de los consumidores en cuanto a la “salud” de ciertos productos y se obtuvo la siguiente información:
- Una mantequilla se consideraba más saludable si se encontraba en un empaque redondo, rojo y amarillo
- Los consumidores consideraban más saludables los productos que estaban en un empaque que parecía una silueta humana delgada
- La información nutrimental encontrada en el frente del empaque podía hacía al producto parecer más saludable
- Los productos con un empaque en colores más claros o balanceados y con formas angulares se percibían como más saludables
- La mayor percepción de algo más saludable era lograda mediante una reducción de sodio o grasa, mientras que un mayor contenido de fibra u omega-3 eran las opciones menos preferidas
- Agregar una imagen o fotografía aumentaba la percepción de salubridad
Como puedes observar, incluso pequeños cambios en la manera en que los productos se empacan pueden provocar una alteración en la manera en que percibimos ciertos alimentos… es por ello que tenemos que ser más inteligentes. Es importante aprender a leer las etiquetas nutricionales, a saber qué ingredientes son mejores para nuestra salud y a conocer, incluso, qué estrategias utilizan los profesionales del marketing, pues esto te ayudará a tomar mejores decisiones nutricionales y a no dejarte llevar por los trucos de mercadotecnia.
Bibliografía
Dietética y nutrición. (s/f.). ¿Son más saludables los productos light? Desmontamos el mito. Dietética y nutrición. https://www.aucal.edu/blog/dietetica-nutricion/son-mas-saludables-los-productos-light-desmontamos-el-mito/
Federación mexicana de diabetes. (s/f.). Significado de reducido, bajo, sin calorías. Federación mexicana de diabetes. https://fmdiabetes.org/etiquetas-nutrimentales-significado-reducido-bajo-sin/Plasek, B., Lakner, Z., & Temesi, A. (2020). Factors that Influence the Perceived Healthiness of Food—Review. Nutrients. doi:10.3390/nu12061881